Gato asustado por cambio de domicilio, ayuda

Se trata del gato de mis padres, Coco. Es un gato gatuno (es decir, sin raza) de once años de edad. Desde que lo tienen ha vivido siempre en la misma casa, pero ahora mis padres se han mudado de domicilio y el gato está asustadísimo.

Se cambiaron definitivamente el miércoles. El gato lloraba sin parar en la puerta de la casa. No comía y estaba muy asustado. Dice mi madre que hoy ha dormido con ellos debajo del edredón y que no ha salido de ahí hasta la hora de comer, es decir, cuando ha oído que mis padres estaban comiendo (es una casa muy chiquitita) y, se supone que por el hambre, ha dejado la cama y el edredón, para ir a ver que comían. Mi madre le ha puesto de comer, pero cuando yo estaba hablando con ella (le acababa de poner la comida) se ha vuelto debajo del edredón.

Estamos preocupados, mi padre dice que le ha oído acercarse a comer por la noche, lo que es buena señal, pero como nunca han pasado por esto ni conocemos a nadie que lo haya sufrido, no sabemos si es una actitud normal y es cuestión de tiempo.

¿Alguien me puede ayudar?

Mil gracias.


Este es Coco

 

A mí me pasó la primera vez que me mudé. Mussi se pasó de concierto toda la noche. Pero al otro día ya estaba bien. Hay que tener paciencia, darle muchos mimitos, si puedes acercarle la comida provisoriamente, dejalo que explore la casa y paciencia y más paciencia.

 

Desastre es normal que el gato extrañe ya que a diferencia del perro nosotros somos sus dueños y el sentido de propiedad es con las personas y no con el espacio físico. los gatos son territoriales, es su casa, su patio y los humanos solo somos los que les demos de comer y les prodigamos mimos y cariño.
Por estos lugares y por experiencia, ya que de pequeña, por el trabajo de mi padre, cambiábamos de domicilio y localidad cada pocos años, tenía que llevar a mis gatos, y que estos se adaptaran , me enseñaron a poner en su canasto, una piedra del lugar y dejarla cerca de donde dispusiera su lugar para estar y dormir. Siempre me dió resultado. pués esta tenía el olor de su propiedad, de su casa.
Espero haberte sido útil. un abrazo para todos Elisa

 

Estoy totalmente deacuerdo con elisa. Es normal que el gato esté asustado.Paciencia, mimos y cariñitos. Se le pasará enseguida

 

Muchas gracias a todos... El gato nunca ha querido cestitas ni nada que se le asemeje, él a lo ancho siempre, en las camas , así que supongo que de ahí le viene lo de quedarse debajo del edredón. Lo de las piedras supongo que será cuando se trate de viviendas unifamiliares ya que en Madrid todo son pisos y apartamentos. Le diré a mi madre que le ponga a mano todas las cosas que solía tener en la otra casa como la mantita, aunque ya os digo que él siempre dormía encima de las camas.

Os ire dando novedades, lo único que me preocupa es que deje de comer, porque entiendo que, con el tiempo, a la nueva ubicación ya ser ira habituando.

Gracias otra vez.

 

Hola Desastre, tienes que tener paciencia, se adaptará con el tiempo. Mi gato lo pasa fatal hasta cuando sale al rellano de la escalera a investigar, una vez se quedo encerrado fuera y lo encontré dos pisos más abajo en un charco de pis que se había hecho de puro miedo, así que imagínate...
En cuanto a la comida, yo se la acercaría a la habitación donde esté durmiendo, ya tendréis tiempo más adelante de enseñarle el sitio fijo donde va a tener su cestito de la arena y su comida... pero no te preocupes, seguro que por la noche se acerca al comedero, no se va a dejar morir de hambre. Vosotros no le presioneis, si quiere tirarse horas y horas debajo del edredon porque se siente más seguro dejadle a su aire, ya irá saliendo poco a poco.
Es increible lo posesivos que son de 'su' casa y sus cosas... en una ocasión mi madre puso halógenos en la cocina, y como él notaba que la luz era distinta, estuvo una semana sin querer entrar en esa habitación, y cuando ya lo hizo no paraba de mirar al techo ¡ son la pera !
Ya nos contarás

 

Buenas noticias

He llamado a mi madre para preguntarle cómo estaba (es que está pachucha la pobre, con catarro) y me ha dicho que Coco ya está tan pelma como siempre, dando la plasta, como si nada hubiera pasado. En estos dos últimos días hizo lo que me dijistéis (se lo transmití), le puso su mantita en una cajita de cartón (que le encantan las cajas, no sé porqué), al lado del sofá y ahí se tumbó. A partir de aquel momento en que además mi madre no se ha podido mover de casa por eso del catarro, el gato se ha empezado a portar como si nada hubiera pasado. Ya se ha hecho a la casa (o mejor, la casa ya se ha hecho a él ) y ya se comporta normalmente.... duerme mucho, come más y dá la brasa como siempre.

Estoy muy contenta porque me daba mucho miedo que pudiera darle una depresión o algo así. Mis padres os dan las gracias a todos porque su "niñito" ya está bien.

Definitivamente hoy es mi día: Coco se ha recuperado, la veterinario me ha llamado para que mañana vaya a recoger mi gatito de dos meses y encima me salen los semilleros de tomates. Qué feliz soy

Miles de gracias a todos

 

Coco

¡que bueno que el gatuno se ambientó!. Los gatos por naturaleza son territoriales. A mi madre le pasó lo mismo, hasta cambió su pelaje. Antes estaba como dueño y señor de casa, ahora comparte su espacio con dos perrunos y qué perrunos..... son enormes. Afortunadamente, se ha adaptado a su nuevo habitat sin problemas.

Saludos y suerte!!!!!

 

estas cosas pasan, IZPI se pasa toda la tarde con el lomo encrespado cada vez q le saco del piso de mis padres y le llevo para el chalet, eso si en cuanto ve a tres pajaros volando x el jardin se le quitan todos los males..

es razonable pensar q un gato q siempre ha vivido con un techo sobre su cabeza se asuste , como el mio, cuando le sacas al aire libre

pero tras una rueda de reconocimiento de un par de días y en lo q marque el territorio nuevo.. va a estar feliz y contento.. lo único asegurate de q no se quiera largar a explorar más allás de la casa nueva xq si les das la mano te toman el brazo y al ser un gato tan mayor puede desorientarse y no saber volver

 

Por algo dicen que los gatos no son de las personas, sino de las casas.