Recibir amigos

Qué tema el de las comidas

a mi lo que me ocurre es que siempre preparo una cantidad exagerada! siempre me paso y luego estoy 3 días (o más) comiendo las sobras y mira que siempre me digo: esta vez haré lo justo y necesario... pero siempre me pasa igual!

 

Bellasombra, a mi me pasa igual, siempre hago de más...pero no me importa si veo que la gente ha comido bien...

Esto me recuerda cierta ocasión en que unas conocidas se quejaban de que habían ido a casa de un familiar y sacó tanta comida que les dió vergüenza ajena... Yo que estoy acostumbrada a esto me sorprendió, pero siempre me ha quedado esa duda...Creeis que hoy en día poner mucha comida es una ordinaried? o es que la gente se está volviendo pija hasta para comer??

 

no lo sé... pero por las dudas, siempre voy sacando de a poco.
En reuniones de amigos, suelo poner cosas en la mesa para que cada uno se sirva, pero a medida que van quedando vacíos los platos, voy llenando... pero acabada la cena, me quedan horrores de comida sin servir calculo fatal

 

Ana, Elionor lo ha explicado muy bien. Todo depende de con qué te las pongas y del tamaño de las mismas. En los ejemplos que ha puesto ella, creo que queda muy claro.

Sin embargo, si te pones perlas durante el día, ojo con los pendientes. Si también son de perlas, han de ser pequeñitos y discretos. Mejor combinarlos con otro tipo de pendientes, siempre sencillos. Las perlas "pesan" mucho, y son una joya que luce por sí sola. Si te las pones, el vestuario ha de ser sobrio y monocromo, que no necesariamente significa clásico.

Lo que nunca ha de ponerse por el día son las lentejuelas, o los brillos en la ropa, y la bisuteria o joyas de cristal tipo gran brillante, especialmente en las orejas.

 

Sobre la comida, las guarniciones y la cantidad:

Una persona adulta normal, puede comer, como mucho, 500 gramos de comida en total cada vez, incluido aperitivo, entrantes, platos principales, postres... cualquier cosa que hagamos por encima de eso, nos sobrará. Unos comerán 300 grs. y otros 700 grs., pero 500 es una media demostrada.

La ostentación (aunque la intención no sea esa) siempre es desagradable en todas las cosas de la vida, pero en la comida puede evitarse fácilmente haciendo los cálculos oportunos.

Las guarniciones te salen solas si conoces las reglas generales de elaboración y elección de los menús:

- No es aconsejable servir dos platos con salsas o elaboraciones similares (langostinos a la plancha y carne a la plancha). Igualmente debe evitarse la repetición de técnicas, si uno de los platos es gratinado, los demás no lo serán.

- Si es una comida preparada en casa, nunca se tratará de impresionar a los invitados con una receta que no se haya preparado antes, pues corremos el riesgo de que nos salga mal.

- Se deben graduar los sabores de menos a más, los sabores más delicados preceden a los más fuertes.

- Hay que estar al tanto de las particularidades dietéticas de los invitados, es decir, si alguno pertenece a una religión que le impida comer determinados alimentos, si hay vegetarianos, diabéticos o alérgicos.

- Hay que llevar una agenda de menús e invitados para evitar repeticiones.

- Se debe procurar evitar los contrastes muy fuertes, por ejemplo, un pescado a la sal y un estofado de toro.

- Elegir los platos según la estación del año. No se come igual en invierno que en verano.

- Seleccionar alimentos de temporada.

- Hay que procurar elegir productos autóctonos.

En cuanto al orden de los platos. Su presentación es la siguiente:

- En primer lugar se sirve el agua, para después poner el pan sobre la mesa, en los platos de pan o en paneras.
- Sopas, cremas, caldos o consomés.
- Si se prescinde de sopas o cremas se puede iniciar una comida con arroces, pastas, verduras, huevos, ensaladas, etc.
- Plato principal: pescado o carne.
- Siempre se sirve antes el pescado que la carne o aves.

Y los postres por el orden siguiente:
- Fruta fresca
- Dulces, flanes o cremas
- Helados o sorbetes
- Café
- Licores
- La norma general es que siempre van primero los alimentos menos dulces o menos fuertes.

De lo cual se concluye que cuando servimos un plato con personalidad, por ejemplo la lubina rellena lo es, ella por sí sola es suficiente, pues además seguro que en la mesa hay ensalada, por ejemplo. Y dependerá también del tipo y variedad de entrantes que hayamos puesto. No todos los platos tienen porqué llevar guarnición.

Compensaremos la "consistencia" de un plato con otro. Si el principal es ligero, podremos permitirnos un postre fuerte, y viceversa.

Mesentiende?

 

Mesentiende?

Sip. Muy en su sitio todo.

 

Se te ha entendido perfectamente.

Ahoramismo imprimo esto y lo guardo como oro en paño, que luego las cosas se me olvida.

Gracias Canela.

Besos a todos, que tengas un muy buen findeeeeeeeeeeeeeeee.

 

Encontré este tema un domingo que estaba con ánimo paseantín, y se me había olvidado que quería comentar un par de cosas.
Justo ahora veo que ya las mencionaron, porque yo soy otra que le resulta molesta la música en ciertos momentos, y que soy maníatica para los olores. Me encantan los "patchulis" pero en la intimidad y sin comida por medio y no llevo bien tampoco las velas de olor, ni cuando están apagadas. Por si algún día alguien me invita

En cuanto a los canapés con base de pan, yo ya di por imposible conseguir que quede seco y, muchísimo menos, crujiente. Así que, con aquello de que si no puedes con el enemigo, únete a él, lo que hago es potenciar precisamente esa suave humedad y monto los canapés dobles con cremas a base de mayonesa sobre pan de molde. Un pastelero me contaba hace poco que ellos los encargos los tenían que empezar a hacer días antes y mantener en cámaras, que incluso mojaban con nata salada el pan (tipo de molde) para que no se resecara, y justo el día antes, o la misma mañana, completaban y napaban con una fina capa de gelatina salada.

Yo lo que hago es hacer "sandwhiches" con cremas de atún o jamón y mayonesa, los envuelvo en papel film y guardo en cajas en la nevera hasta el momento de montar los platos, que sólo tendré que cortarlos en serie y terminar la presentación.
Si los quiero de pan normal o calientes, me temo, no queda sino hacerlos íntegramente en el último momento.

Canela, ¡qué buenas ideas! Pena no haber encontrado el post antes de las fiestas de navidad y mi cuarenta cumple; aunque yo con las perlas, seguro no tendré nunca problemas
EDITO para añadir que corro a guardar todos esos apuntes y a mirar la agenda, porque la próxima fiesta me va a quedar de miedo aunque tenga que estar estudiando meses antes.

 

Canela, muy útiles tus apuntes...tomo nota! y al resto muchas gracias también por las ideas. Este fin de semana tengo invitados, seguro que me acordaré de muchas cosas que se están comentando aqui!

 

Una pregunta que queria yo hacer, por si alguien lo sabe....¿como se disponen los cubiertos?....yo siempre me hago un lio

 

Y quedaría mal si preparamos más de un postre "principal"?... es que hace una semana, precisamene en reunión de amigos saqué el postre que sabía era el preferido de una amiga, pero resultó que al marido no le gustaba para nada y se quedó sin probar bocado


Aunque hay confianza porque son amigos, se pasa bastante mal con el desatino

 

Ay Canela, eres una mina!

Referente a las perlas... yo tengo que ser discreta "por narices", no ves que soy mu chiquitita y si me descuido, cualquier cosa que me ponga hace más bulto que yo! Con lo que me gustan a mi los tigres y los leopardos y no me veo, oye! Yo quiero ser Sofía Loreeennn y ponérmelo to junto!

Yo soy muy torpe y tengo una foto, muy gastadita ya, en el cajón de los cubiertos "formales", me sirve para poner la mesa "como Dios manda" cuando toca

Gracias a todas!

 

Adormidera, efectivamente, tienes razón. Si quieres canapés estupendos con pan fresco, no queda otro remedio que hacerlo así.

Hada, aquí os pongo una fotografía de la mesa perfecta:



Observaciones:

Sólo se ponen los cubiertos que se van a usar. Un vistazo simple nos revelará casi sin margen de error lo que vamos a comer. En esta foto, es obvio que comenzaremos por una sopa o crema, seguida de un pescado y después una carne.

Los cubiertos se colocan en el orden en que van a ser utilizados, y en el lado por el que serán cogidos. Es decir, de fuera hacia dentro, primero los de la derecha: cuchara, cuchillo pescado, cuchillo carne. A la izquierda: tenedor pescado y tenedor carne. En la parte superior de los platos, los cubiertos de postre. La cuchara, con el mango hacia la derecha; el tenedor, con el mango hacia la izquierda. El cuchillo de postre, si fuera necesario, con el mango hacia la derecha y todos en el mismo orden en que se van a usar, de arriba hacia abajo.

En España, los cubiertos se colocan hacia arriba, y los cuchillos con el filo hacia el plato.

En esa foto pueden verse también los platos; no hay dos llanos, sino un bajoplato y un llano. El bajoplato no se quita nunca; sirve para marcar el sitio del comensal en la mesa y evitar que el mantel se quede "vacío" cuando se cambian los platos. Ese plato llano que se pone encima del bajo plato, se llama de "presentación", y puede o no usarse para la comida, en función del tipo de servicio que se de (autoservicio, que en casa es el más normal) o por camareros (a la francesa o a la inglesa).

También están las copas, colocadas en el orden correcto. Sólo se ponen las que se vayan a usar, por supuesto, pero sin que varíe el orden. La copa del agua no se quita nunca, aunque se retire el resto de utensilios.

A la izquierda de la copa de agua, está el plato para el pan, ese gran desconocido que nunca sabe quién es su dueño . A la derecha, sobre los cubiertos, el plato de la mantequilla con su cubierto, en caso de que el menú deba llevarla.

Y podemos hablar de qué debe haber bajo el mantel... de cuánto espacio necesita cada persona... de los tipos de mesa que podemos poner... de cómo se comen ciertas cosas... vosotras diréis.

 

Bellasombra, nada de sentirse mal por eso. Ni hablar. Tú no has cometido ningún desatino, pues no puedes saber los gustos de todos tus invitados. La persona invitada, por muy amigo que sea, agradecerá cualquier cosa que le ofrezcas, pues para eso le has invitado. Si la mala suerte hace que algo no le guste, pues dentro de la confianza podrá decirte que no lo comerá (regular regular, pues tiene que desagradarle muchísimo para tener esa descortesía... salvo que sea alérgico o similar. Es mejor pedir poquísima cantidad alegando poca hambre, por ejemplo).

Tú siempre puedes ofrecerle otra cosa; en casa siempre hay fruta fresca de algún tipo, y si no hay, pues seguro que no le pasará nada por quedarse sin postre. Ahora ya lo sabes para la próxima vez, así que no volverá a suceder. Por esas cosas es bueno llevar una pequeña agenda cuando invitamos mucho; en ella podemos apuntar esas "manías" de nuestros amigos para evitarlas.

Sobre más de un postre, pues claro que sí, aunque es algo muy optativo. Deberán ser postres similares o que se lleven bien entre ellos. Es decir, no se gustan nada un arroz con leche y unas natillas, por ejemplo, pero unas natillas con helado quedan estupendas. O dos ó tres variedades de tarta, servidas al centro de la mesa para que cada uno elija la que más le guste.

Anitaaaaaaaa qué me vas a contar de tamaños, jamía

 

Hola! que alegría todos los aportes que han ido dando. No había opinado porque estaba en la playa dado que en mi paìs estamos en verano y estoy de vacaciones, vine este fin de semana y me voy otra vez, pero me dio mucha alegría los aportes. Sobre la forma de poner la mesa, ya de una forma mas protocolar, me parece muy interesante.
En relación a los postres, a mi me gusta cuando tengo tiempo hacer lo que acá llamamos "mesa de postres" que es tratar de poner 3 o 4 postres diferentes, por ej. un lemon pai, un cheese cake, flan con salsa de caramelo y una isla flotante con salsa sambayon. Esos postres abarcan una gama de paladares bastante amplia, son postres frescos, no muy pesados. Es lindo presentarlos todos en una mesa y cada cual se sirve.