Ante todo un saludo grande a todos los cactuseros/as. Como habréis observado llevo bastante tiempo sin aparecer por aquí, debido a problemas de salud lo cual también me ha obligado a dejar de seguir coleccionando cactus y suculentas mis plantas preferidas. estoy organizando todas las fotos que e echo durante muchos años, y con vuestro permiso me gustaria compartirlas ya que para los aficionados aunque sean repetitivas siempre es un gozo verlas. Espero que las disfrutes tanto como yo. Mammillaria gracilis Mammillaria spinosissima "Un pico"
gracias por compartir no importa que se repitan siempre se encuentran nuevos angulos que a los novatos como yo les permite conocer mas de ellos saludos
Gracias a vosotros por la atención. Aqui van 2 mas Foto nº 3 Mammillaria rioverdensis Foto nº 4 Mammillaria pectinifera
Encantada de saludarte, tocaya (preciosa tu tierra valenciana, por cierto; tengo la suerte de conocerla bien) Gracias por esas imágenes, tienes unas plantas preciosas. Espero que tu salud vaya a mejor en breve y puedas seguir cultivándolas con la dedicación y el esmero que seguro les brindas
Foto nº 5 Astrophytum capricorne Foto nº 6 Mammillaria pringlei De salud estoy mejor, prueba que ya me tenéis otra vez por aquí. gracias.
Hay un aspecto que me interesa especialmente de esas plantas, que es su tamaño y forma finales. Me interesa más incluso que su floración, siempre espectacular.
Buenos dias Azahar. Gracias por mostrar parte de tu colección de cactus, será un placer recibir mas fotos de estas bellezas. Aprovecho la ocasión para desearte una muy pronta recuperación de tu salud. Un cordial saludo y mucho ¡¡¡¡ÁNIMO!!!!!
Hoy por ser domingo ración doble, esta Espostoa ya no la tengo pero me quedan las fotos y el recuerdo. ( con mucho dolor de corazón tuvimos que trasladarla). Foto nº 7 Espostoa lanata, mas de 30 años. Foto nº 8 Flor de Espostoa lanata Foto nº 9 Fruto de Espostoa lanata
Espero que esté trasladada a un sitio donde prospere, es un ejemplar magnifico y después de tantos años no me extraña que sientas aún la pena. ¡Qué barbaridad el tamaño de sus frutos!