Saludos Es la especie cleistocactus colademononis o es otra especie? Alguien que me ayude a identificar esta especie por favor.
mira este artículo: Lowry, M. (2016). A synopsis of the genus Cleistocactus Lemaire (Cactaceae). Bradleya. Yearbook of the British Cactus and Succulent Society 34: 148-186 Aquí lo puedes obtener: https://es.booksc.org/book/68604528/b4e219
Me he repasado el artículo que facilitas, y no menciona en ninguna parte el motivo de ese cambio. Al contrario, indica claramente que el basiónimo (y todos los usos de autores posteriores) es colademononis, por lo que ese cambio sería una enmienda injustificada, salvo que se exponga un motivo claro y válido.
Hola: "Colademono" es el nombre común de la planta, y como nombre debe figurar tal cual, en aposición, no latinizado y en su genitivo. Saludos
Eso contradice lo que escribiste en primer lugar. Si es el nombre común, no ha de mezclarse de ninguna manera con un taxon, y la subespecie seguirá siendo colademononis (que por cierto yo siempre había interpretado como "cola de demonio").
Hola: No me has entendido. Hay unos cuantos casos casos de epítetos para los que el autor eligió el nombre de la planta en el idioma local (nombre común); me viene a la mente Styrax obassia, siendo "obassia" el nombre japonés del arbolito: un substantivo en aposición, sin modificar. "Cola de mono" es el nombre común - o uno de los nombres comunes- de esta cactácea en su área de distribución natural. "Colademononis" es un sinsentido, producto precisamente de mezclar un nombre común en castellano -en este caso compuesto por dos substantivos- con una desinencia latina (de genitivo); si se latiniza ese nombre común -ojo, no es un nombre propio- el resultado sería "cauda-simiae" (su traducción). Saludos
No, no te he entendido, y sigo sin entenderte. Epítetos basados en nombres comunes locales hay infinidad, tanto en plantas como en animales. Eso lo sé pero no tiene relevancia alguna para cambiar el epíteto original por otro. Colademononis no es un sinsentido, es el epíteto específico del basiónimo, y como tal debe respetarse. Que sea un epíteto tomado de otro idioma pero latinizado no cambia nada en absoluto. Creo que no es el único caso, ahora no me vienen otros a lamente, pero por ejemplo casi todos los microlepidópteros acaban en -ella, y algunos epítetos están basados en apellidos de personas relevantes en su estudio pero terminados en ese sufijo latinizado, digamos, por ejemplo, Micropterix paykullella. Pero incluso si no hubiera ningún otro caso similar y el epíteto fuera realmente un sinsentido, seguiría siendo el epíteto de la descripción original, que debe conservarse siempre, salvo casos de homonimia anterior o en raras ocasiones, de nombres conservados por su uso prevalente en la literatura contra homónimos anteriores. Es decir, el cambio de colademononis a colademono es simplemente ilegítimo y no tiene ninguna razón de ser.