Pues parece algún hongo, como roya o negrilla. Ahora en invierno no hace falta que hagas nada, porque los hongos con el frío no se reproducen, y la mayoría del follaje caerá. Pero el rosal ha quedado infectado de esporas que volverán a desarrollarse la próxima temporada. En primavera, tras la poda y cuando los brotes del rosal vuelvan a estar crecidos, hacia mediados de primavera, fumiga todos los rosales con un combinado de insecticida para el pulgón (como imidacloprid), con algún fungicida (como tebuconazol). El mejor momento para fumigar es cuando el follaje ya está totalmente desarrollado y se empiezan a formar los capullos de la floración de mayo. En los sucesivos rebrotes durante la temporada, vuelve a fumigar con ambos pesticidas cada vez que los rosales están formando capullos o tengan las flores a punto de abrirse.