Buenos días a todos. tenemos un abeto en el jardín plantado desde hace 4 años. Siempre ha tenido un aspecto estupendo. Desde hace 3-4 meses la parte inferior ha empezado a desmejorarse. Ha perdido muchas hojas y su aspecto no es bueno. Mando unas fotos para ver si alguien me puede ayudar. He estado mirando y por mi mismo no he conseguido dar con la clave. Muchas gracias a todos.
En muchas coníferas es normal que estas sufran una "autopoda" según crecen, las hojas inferiores pierden vigor y acaban secarse y caer. Con todo es un proceso gradual y si ha sido de golpe podría haber otro problema ahí. ¿Algún cambio en el régimen de riego?¿Uso de algún herbicida nuevo?
Esa sombra que aparece a la izquierda, ¿barre la copa del árbol? En caso afirmativo, esa sombra abundará en el proceso indicado por @D.E.L De igual manera el seto del fondo pierde sus hojas inferiores porque las superiores les dan sombra.
Te copio una respuesta que hice en una consulta parecida a la tuya: "Los abetos son árboles poco adecuados para climas continentales. No soportan el calor. El abeto común (Abies alba) crece en los Pirineos solo en los bosques de cotas altas y únicamente hay bosques de abetos en las vertientes norte de las laderas de las montañas, donde están casi todo el día a la sombra. Alguna especie de abeto híbrido como el Abies x masjoani son algo más reistentes al calor seco, pero hay coníferas mucho mejores para clima continental. Precisamente yo el invierno pasado hice arrancar un abeto del jardín comunitario que rodea la piscina de mi comunidad de vecinos. Lo había plantado el constructor hacía veintidós años, al entregar la obra. A pesar de que estaba en semisombra y plantado en un césped, había crecido en estos años solo hasta unos seis metros de altura, y ya hacía como siete u ocho años que se le secó la rama guía y no crecía en altura. También las ramas bajas cada vez estaban más despobladas. A pesar que estaba en mucho mejor estado que el tuyo acordamos que los jardineros lo arrancaran el pasado invierno, y en su lugar hice plantar un cedro del Atlas azul (Cedrus atlantica 'Glauca'), de unos dos metros y medio de altura, un árbol que aguanta mucho mejor el calor seco y el pleno sol. El nuevo árbol ha arraigado de maravilla y este año ya ha empezado a crecer con fuerza." Pues eso, los veranos achicharrantes continentales son poco adecuados para los abetos. Los primeros cuatro años, el árbol ha tenido el vigor de un árbol joven y sus necesidades de agua seguramente también quedaban cubiertas con el riego del césped. Al crecer y extender sus raíces el árbol necesita más agua, y en un clima continental sufre mucha deshidratación en verano. Para no morir, el árbol se desprende del follaje y las ramas más bajas para reducir la superficie de transpiración, conservando verde la parte superior y el ápice de crecimiento. Para evitar que continúe desmejorándose y el proceso vaya progresando, yo le cavaría un alcorque amplio alrededor de la base del tronco, que tenga una capacidad mínima de veinte litros de agua. De abril a septiembre deberías hacerle un par de riegos por semana abundantes (tres en pleno verano) llenando el alcorque de agua a manguera, regadera, o como quieras, además de activar el riego del césped. Como al regar más también lavarás más el terreno, hay que aportar abonos regularmente, dos o tres veces al año (abono general en grano y quelatos de hierro). El primer abonado del año es el más importante y se ha de hacer cuando los brotes ya se han abierto y empiezan a desarrollarse con fuerza, ya que las hojas en desarrollo son las que mejor fijan a sus tejidos los elementos de los abonos.