Hola. En septiembre del año pasado, corté dos ramas de laurel (Laurus nobilis) de unos 20cm de largo y 1cm de grosor para intentar esquejarlas. El procedimiento que seguí fue el siguiente, les corte las hojas a la mitad para evitar la evaporación, los planté en macetas de plástico con sustrato comercial para plantas de jardín y los tapé con una botella de plástico tranparente a modo de invernadero para aumentar la humedad del ambiente. Los he tenido dentro de casa desde entonces con temperaturas entre 18ºC-23ºC y con luz directa del sol, unas tres horas por la mañana, que pasa a través de una ventana. El tema es que a día de hoy, esas medias-hojas siguen verdes y flexibles (no están secas), las yemas latentes tampoco están secas y los troncos no parecen secos pero ¿cómo puedo saber si va todo por buen camino y cuándo puedo quitar las botellas de plástico para pasarlas al exterior, en una terraza orientada al sur?. Gracias. Un saludo.
Buenas David_Alcoy, Mi consejo es que, por el momento, es mejor esperar un poco, todavia faltan periodos frios y posibles heladas. Ademas al haberlos tenido en casa con esas temperaturas el paso a un exterior frio puede ser muy dañino para una planta que esta naciendo y desarrollando su sistema radicular. En primavera (la altura dependera de donde estes) ya habra tiempo de plantarlas en el exterior. Paciencia, suerte y saludos cordiales AJPA
¡Hola! ¿qué hay? Lo de septiembre y los 20 cm está bien. Los esquejes de plantas leñosas se hacen a partir de agosto hasta bien entrado el invierno, pero cuanto antes mejor. Hay que cortar la parte inferior a unos mm por debajo del último nudo y se pelan la parte inferior de manera a dejar 2 a 3 nudos sin hojas los cuales serán enterrados; el superior a también se corta a unos mm encima de manera a eliminar la parte blanda si la hay. No se deben utilizar tallos no totalmente leñosos o semileñosos. Lo de recortar las hojas no es necesario si haces los esquejes en otoño-invierno. Como sustrato para los esquejes de tallos leñosos utilizo una mezcla de ½ de tierra arcillosa y ½ de arena de río. No hace falta echar fertilizante alguno pero sí un poco de hormonas de enrazaimiento no viene mal. Las macetas a utilizar tienen que ser estrechas y tener unos 20 cm de alto y los esquejes tocar casi el fondo. Una vez repicados los esquejes en las macetas a razón de 3 a 5 en cada una, hay que regar copiosamente y procurar que el sustrato no se seque nunca. Coloca las macetas en un lugar luminoso pero que les den los rayos directos del sol. No hace falta protegerlos con una bolsa de plástico en invierno. Los esquejes están enraizados cuando las raíces empiezan a salir por el fondo de la maceta. Ello puede tardar meses. S2, Eiffel.