PLANTA DEL DIA Manzanillo (Hippomane mancinella L.) Foto de: http://www.estereoazul.com/la-manzanilla-de-la-muerte-es-el-arbol-mas-peligroso-del-mundo-sabes-por-que/ Foto de: R. Pérez en http://ctfs.si.edu/webatlas/findinfo.php?specid=3601&leng=spanish Familia: Euforbiáceas Origen: América Central, Caribe Características: Es, sin duda, una de las plantas más peligrosas del mundo. No por nada le llaman también “el árbol de la muerte”. Árbol de buen porte, monoico, de 5-20 m. de altura, tronco ramificado a baja altura, corteza gruesa y quebrada, de color gris. La copa es amplia y globosa con ramas extendidas. Los frutos son pomos globosos, muy fragantes, cubiertos de una piel glauca y brillante, con semillas redondeadas de color pardo. Hojas: Simples y alternas, elípticas, coriáceas, con ápice agudo, bordes dentados y base redondeada y prominentes nervaduras de color amarillo. Las hojas se encuentran agrupadas en los ápices de las ramitas. Es perennifolio, aunque pierde parte de su copa durante la temporada más seca, entre diciembre y enero. Flores: Inflorescencias en espigas axilares. Flores pequeñas y verdosas. Época de floración: Casi todo el año. Destino: Ninguno conocido. Adaptación: Buena. Suelos: Húmedos, fértiles y con buen drenaje. Luminosidad: Plena. Resistencia al frío: En origen, es resistente. Humedad del ambiente: Crece sobre suelos arenosos de alta concentración salina, áreas costeras y estuarios cercanos a los manglares. Riego: Creciendo cerca de cursos de agua, necesita poca atención en cuanto a riego. Abonos: No necesita. Causas parasitarias: No se le conocen. Propagación: Por semillas dispersadas por las corrientes marinas. Cuidado: Tiene apariencia de manzano pero todo en él es puro veneno. Tocar el tronco ocasiona graves quemaduras, comer los frutos termina en una intoxicación mortal e incluso quemar su madera produce un humo tóxico. En caso de lluvia, tampoco es conveniente resguardarse bajo el árbol, ya que el agua que se escurre por las hojas se convierte en una lluvia ácida como si cayera ácido clorhídrico. Ni siquiera se aconseja echarse una siesta debajo, pues expele un polen, sobre todo en las horas de mayor temperatura, que es sumamente cáustico y consume con facilidad la tela de algodón y otros materiales ligeros. Por lo tanto colocarse bajo la sombra de este árbol durante largo tiempo puede producir eczemas en la piel que pueden llegar a convertirse en quemaduras de primer y segundo grado. Su savia es irritante e incluso puede ocasionar ceguera en contacto con los ojos. Ni siquiera pensar de comer alguno de sus frutos que parecen manzanas, ya que al probarlas, el gusto dulce y agradable del mordisco inicial se convierte a los diez minutos en una inflamación virulenta de las mucosas, la tráquea se cierra y, en algunos casos, se produce una hemorragia masiva en cuanto la toxina alcanza el estómago. Ahora se encuentra en proceso de erradicación total debido al temor por la forma en que puede afectar a los turistas que visitan el Caribe. Y cuando no es cortado, se le señala con un gran cartel que indica que es mejor no acercarse a él. Usos: Los caribeños lo han usado para envenenar sus flechas. En la actualidad no se le conocen usos útiles. Foto de: R. Pérez en http://ctfs.si.edu/webatlas/findinfo.php?specid=3601&leng=spanish Las imágenes son de la red .
