Buenas! Creo que no he llegado a presentar a mis peques por aquí ¿verdad? Quoll y Kiwi tienen una historia triste detrás. Quoll (la hembra marrón y blanca) llegó a mi casa junto con otros 4 ratoncitos a los que habían abandonado en una jaula minúscula. Los acogí encantada, separé al macho. Pero desgraciadamente ya había dejado preñadas a 3 de las 4 hembras (Quoll se libró misteriosamente). Dos de las peques parieron en otra casa y el macho se fue adoptado. Yo me quedé en acogida a Quoll y a Piñata (ya fallecida) que fue madre de 8 preciosos ratoncitos. Entre ellos Kiwi (macho castrado marrón). Encontré casas buenas para todos relativamente rápido, menos para Kiwi, que al final me dio tanta pena que decidí quedármelo. Claro, que para que viviera con su madre y Quoll debía ser castrado. Como curiosidad, todos los veterinarios por donde han pasado estos pequeños(las crías que nacieron en mi casa) han comentado que parecen ser mezcla de ratón salvaje y no me extrañaría dado que se comportan un poco raro y al menos Kiwi es muy hablador. Viven en un terrario de 1m con sustrato de cáñamo y carefesh. Quoll me llegó tremendamente aterrada. Pero por suerte la convencí de que era buena gente. Y Kiwi es un ratón que se estresa por todo y tengo que tener cuidado. Llevan conmigo desde octubre del 2020. Kiwi nació el 20 de octubre de 2020