Hola Amigos. Hace un tiempo atrás fuí invitado por el gobierno colombiano a dar unas charlas y a participar de unos experimentos. Aquí se me ve tratando de parecer un tipo serio. En realidad fue un viaje relámpago, no obstante un médico colombiano me invitó a conocer el desierto de Tatacoa. Espero que se escriba así. Salimos muy temprano y paramos a desayunar . El desayuno consistía en café, que allí llaman tinto, y carne hervida. En abundancia. A la que más gustó este menú fue a una de las participantes de la excursión. Sigue el viaje hasta una ciudad pequeña, donde había un mercado o feria de frutas. Y como soy muy afecto a éstas, le hice los honores. Afecto si, pero no a comer desmesuradamente. Imaginense el efecto. No me atreví a toser durante todo el viaje. Para colmo parábamos a refrescarnos en bares y heladerías del camino. Esta es una doctora que participaba de la excursión, y vemos una lista de las bebidas que podíamos gustar. El camino nos llevaba por parajes el los que para lo que estabamos buscando había demasiada humedad, no obstante abundaban los cactus, en especial los hilocereus. Sorprendido con las manos en la masa. Y llegamos a nuestro destino. El auto con el que llegamos y los participantes. Tuvimos que contratar un guía, sin el cual no se nos permitía internarnos en el desierto. Un largo camino . Y el paisaje comenzó a desertificarse cada vez más. Había muchos cactus. Opuntias, cereus y similares, pero lo que buscabamos no aparecía. Pero no pasó mucho tiempo. Aquí estaban. Los primeros de muchos melocactus curvispinus. Y llegué al máximo de las fotos permitidas. Saludos, Hansi. .
Felicitaciones por tan hermoso viaje Juan!!!! Qué honor conocerte y que lindo ver esos Melocactus en su hábitat. Saludos
Hola Juan Sentimientos encontrados me suscitó tu post. Por un lado, la felicidad de saber que estuviste en Colombia y que un compatriota tuvo la feliz ocurrencia de llevarte a ese bellísimo lugar. Por el otro, mucha tristeza de saber que estuviste tan cerca y no haber podido conocerte y darte, con mucho respeto, un fuerte abrazo. Estoy seguro que de haber sabido tu venida a nuestro país, varios amantes de los cactus nos hubiéramos reunido para brindarte un café y lo más importante te hubiéramos atafagado y aburrido de preguntas y charla sobre los que queremos tanto Un abrazo, querido amigo.
Maravilloso viaje y relato, y muchísima envidia de haber podido disfrutar de tanta belleza. Gracias por compartirla con nosotros.
Todo muy lindo, todo muy lindo. Pero me pregunto que habrá opinado Elena con el hecho de que tuvieras un "Amor prohibido" con la doctora colombiana
Que bonito viaje, y que bién documentado !!!, gracias por dejarnos compartirlo, y conocerte, aunque sea fotograficamente.
Hermoso relato Juan ......gracias por compartirlo me alegro muchisimo por ese viaje...se te ve feliz!!!! en tu salsa como diriamos por aca
Hola Juan que gusto conocerte a traves de las fotos y que buen viaje, en donde no podian faltar LOS CACTUS increibles esos melocactus. saludos Ariel
Que buen viaje!!! sabés... no me imaginaba que en Colombia pudiera haber tantos cactus "en hábitat", ya ven, por ser tan húmedo el clima...
Precioso viaje, los parajes que fotografías y describes, pasan a formar parte del patrimonio de uno mismo. Gracias por compartirlos. Salut
Que lindo viaje y que paisajes me imagino que lo deves aver pasado estupendo me encanto la foto del hilocereus me encanta ese cactus y al final el melocactus curvispinus que bellesa y mas encontrarlo en estado natural te felisito por es viaje Saludos