Apio (Apium graveolens L.)

Tema en 'Fichas de 42 hortalizas' comenzado por Betina2010, 21/8/18.

  1. Betina2010

    Betina2010 Marta

    PLANTA DEL DIA



    Apio (Apium graveolens L.)



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    Familia: Apiáceas

    Origen: Zona mediterránea

    Características: Hierba bienal o perenne, aromática, que posee tallos largos y fibrosos que crecen en racimos apretados, rectos y paralelos. El blanqueo de los tallos, en cultivo, los hace de un sabor más dulce y el característico aroma que lo convierte en un buen ingrediente de ensaladas y sopas. El fruto es indehiscente formado por un gineceo de dos carpelos unidos que en la madurez se separan, casi circular, comprimido lateralmente, sin pelos, formado por 2 mericarpios que en en su parte dorsal tienen 5 costillas levemente aladas, cada uno con una semilla. Las semillas son anchas ovoides a globosas.

    Hojas: Alternas, pinnadas a bipinnadas, peciolos de base envainante, los foliolos son ovados u obovados, cuneados en la base, margen profundamente lobado o dentado; las hojas superiores más pequeñas que las inferiores y cortamente pecioladas o subsésiles.

    Flores: Se producen en densas umbelas compuestas, son pequeñas, de simetría radial, hermafroditas, blancas; cáliz diminuto, unido al ovario; 5 pétalos libres, ovados, el ápice largo y curvado hacia el centro de la flor; 5 estambres alternados con los pétalos; ovario ínfero.

    Época de floración: Primavera.

    Destino: Medicinal, culinario.

    Adaptación: Buena. Los hábitats naturales eran salados y húmedos, o en suelos pantanosos cerca de la costa.

    Suelos: Prefiere suelos húmedos, ricos en nutrientes y fangosos.

    Luminosidad: Plena.

    Resistencia al frío: Resistente.

    Humedad del ambiente: Prefiere ambientes húmedos.

    Riego: Abundante.

    Abonos:
    Necesita abonos nitrogenados y potásicos, especialmente cuando los suelos son ligeros. Además es muy sensible al déficit de boro, azufre y magnesio. El abono foliar aplicado una vez por semana suele dar buenos resultados, para los aportes de boro, magnesio y calcio en caso de suelos pobres en estos elementos.

    Causas parasitarias: Enfermedades: Virus del Mosaico del Apio, Mildiu del apio (Plasmopara nivea Schr.), Mancha foliar o tizón (Cercospora apii Fres.), Septoriosis [Septoria apii (Briosi et Car.) Chest., Septoria apii graveolentis (Dorg)].
    Plagas: Mosca de la zanahoria [Psylla rosae (Fab)], Mosca del apio (Phylophylla heraclei L.), Pulgones (Aphisspp.,Myzus persicae), Gusanos grises (Agrotis sp.), Nemátodos (Dytilenchus dipsaci Kuehm.)

    Propagación: Por semillas.

    Cuidados: No requiere cuidados especiales.

    Usos:
    Medicinal: Es carminativo, sedante, aperitivo, digestivo, emenagogo, depurativo, regenerador sanguíneo y ligeramente laxante. Se puede ingerir crudo, cocido o en jugo. Además de su crujiente textura y sabor, es una verdura “equilibrante”. Si se combina con la zanahoria y el tomate, el jugo de apio ayuda a calmar los nervios y es un buen remineralizante. La ensalada de apio con un poco de sal puede usarse eficazmente para combatir el exceso de acidez del tubo digestivo y aliviar la colitis. La ensalada de apio y aguacate se recomienda en caso de enfermedades del estómago e intestino. Ayuda al cuerpo a deshacerse de impurezas a través de su función diurética. Ayuda a la formación del esmalte dentario. Disminuye las enfermedades hepáticas, combate las infecciones, ayuda a la eliminación de cálculos renales, mejora la memoria y en uso externo suele comportarse como un cicatrizante.
    En jugo es eficaz para eliminar el exceso de ácido úrico, combatir el reumatismo, el sobrepeso, flatulencias, padecimientos nerviosos y menstruación escasa.
    En cuanto al mayor efecto diurético del apio, es debido el cocimiento de las semillas, útil en caso de hipertensión arterial, afección cardíaca congestiva, ansiedad e insomnio. También resulta beneficiosa para combatir el síndrome premenstrual, que provoca la acumulación de líquidos en los tejidos.
    Contraindicaciones: Por su efecto emenagogo es recomendable evitar consumir apio en cualquiera de sus formas durante el embarazo. Como diurético puede agotar el potasio y otras sales minerales, por lo que se recomienda consumir plátanos y verduras frescas para equilibrar esa pérdida.
    El apio se encuentra entre un pequeño grupo de alimentos (encabezados por maníes) que parecen provocar las reacciones alérgicas más graves; para las personas alérgicas al apio, puede causar un choque anafiláctico potencialmente mortal.

    Culinario: Sus tallos y hojas se comen en ensalada y se usan para cocinar como saborizante en sopas, guisos y asados de olla. Las semillas también se usan como especia. Las hojas de apio se pueden secar como condimento para usar con pescado asado o frito.
    Otros usos: Las semillas producen un valioso aceite esencial que se usa en la industria de los perfumes.
    También se pueden moler y mezclar con sal, para producir sal de apio, la que se usa como aderezo, en cócteles.



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    Fotos de: http://www.botanicayjardines.com/apium-graveolens/


    Las imágenes son de la red
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