UN NUEVO AMANECER Cuando te sientas solo y te sientas caer, cuando todo esté nublado muy adentro de tu ser, cuando sientas un vacío y no comprendas el por qué, si te rodean las mentiras y te preguntes... la verdad... donde se fué? No te preocupes ,querido amigo, ésto suele suceder... son momentos que transcurren pero.... qué le vas a hacer? La fuerza está dentro tuyo y nada te podrá vencer si la nobleza existe en tu alma, y el amor está en tu ser. Si te entregás siempre entero y solo cariño sabés ofrecer no te preocupes, amigo mío,, la verdad por su propio peso siempre suele aparecer. Y nunca pierdas la alegría ni tu sonrisa a flor de piel, pensá siempre que en la vida todo cambia noche y día, y que se acaban las neblinas cuando un rayo de sol comienza a aparecer, y que siempre, aunque lo impidan, después de cada noche que termina comienza un nuevo amanecer.... Tormenta
MIEDO Aquí, sobre tu pecho, tengo miedo de todo; estréchame en tus brazos como una golondrina y dime la palabra, la palabra divina que encuentre en mis oídos dulcísimo acomodo. Háblame de amor, arrúllame, dame el mejor apodo, besa mis pobres manos, acaricia la fina mata de mis cabellos, y olvidaré, mezquina, que soy, ¡oh cielo eterno!, sólo un poco de lodo. ¡Es tan mala la vida! ¡Andan sueltas las fieras!... Oh, no he tenido nunca las bellas primaveras que tienen las mujeres cuando todo lo ignoran. En tus brazos, amado, quiero soñar en ellos, mientras tus manos blancas suavizan mis cabellos, mientras mis labios besan, mientras mis ojos lloran. Alfonsina Storni
NO ERES TUYA (Miguel de Unamuno) No eres tuya, no eres tuya; no recuerdas; No te quieres, no te quieres, pobre niña, Y si no recuerdas, ¿dime, cómo quieres Llamar tuya a esa tu vida? Esa tu alma -así la llamas-, niña, dime, si en tu pecho de recuerdos no es tejida ¿cómo es alma? ¿cómo es tuya? ¿cómo vive? ¡Vives muerta, pobrecilla! Llegará un día muy triste, no lo dudes en que llores en silencio de agonía porque no puedas querer a quien te quiera y ¡ay de tu alma en aquél día! Buscarás en las honduras de tu pecho, llanto tierno como riego de la dicha, seco encontrarás el corazón y ¡muerta la corriente de la vida! No te quieres, no te quieres, desgraciada, y si no sabes quererte, pobre niña, cuando de otros el cariño necesites será la hora ya tardía. Búscate alma en el recuerdo y serás tuya, nunca olvides, nunca olvides, que el que olvida pierde el alma y no la encuentra, y es su muerte al morir definitiva.
pensa miento Pensar… te me nos y ya no puedo, se engangrenan una a una las ideas como heridas raspándome la hiel de la boca un beso, olvidado un otoño en esta orilla se ensordecen una a una las palabras de un abrazo partido en la distancia y es tormenta de arena mi garganta, muriéndose de sed Pensar… nos te me ya no puedo y me derrumba el olvido dibujado, una noche a cuentagotas, esperada… sin beber... miel y hieL
SONETO FINAL Miguel Hernández (El Rayo que no cesa) Por desplumar arcángeles glaciales, la nevada lilial de esbeltos dientes es condenada al llanto de las fuentes y al desconsuelo de los manantiales. Por difundir su alma en los metales, por dar el fuego al hierro sus orientes, al dolor de los yunques inclementes lo arrastran los herreros torrenciales. Al doloroso trato de la espina, al fatal desaliento de la rosa y a la acción corrosiva de la muerte arrojado me veo, y tanta ruina no es por otra desgracia ni otra cosa que por quererte y sólo por quererte.
Rastros Estoy varada… con las aletas truncas al borde del océano y la piel rasgada en la arena caliente siento el rumor del agua replicando una huída el regreso y algún rumbo que perdí una vez ninguna en el fondo imaginario de tus brazos Estoy varada… palpitando el suelo, pedregoso que acaricia la agonía de nostalgias y es mi cuerpo un arrecife sin escudos de las huellas de tus huellas salpicadas de tus labios… una gota de sal....
VERE POR TI (Miguel de Unamuno) “Me desconozco” dices, mas mira, ten por cierto que a conocerse empieza el hombre cuando clama “me desconozco” y llora; entonces a sus ojos el corazón abierto descubre de su vida la verdadera trama; entonces es su aurora. No, nadie se conoce, hasta que no le toca la luz de un alma hermana que de lo eterno llega y el fondo le ilumina; tus íntimos sentires florecen en mi boca, tu vista está en mis ojos, mira por mí mi ciega, mira por mí y camina. “Estoy ciega”, me dice; apóyate en mi brazo y alumbra con tus ojos nuestra escabrosa senda perdida en lo futuro; Veré por ti, confía; tu vista es este lazo que a mí te ató, mis ojos son para ti la prenda de un caminar seguro. ¿Qué importa que los tuyos no vean el camino si dan luz a los míos y me lo alumbran todo con su tranquila lumbre? Apóyate en mis hombros, confíate al Destino, veré por ti, mi ciega, te apartaré del lodo, le llevaré a la cumbre. Y allí, en la luz envuelta, se te abrirán los ojos verás cómo esta senda tras de nosotros, lejos, se pierde en lontananza y en ella de esta vida los míseros despojos y abrírsenos radiante del cielo a los reflejos lo que es hoy esperanza.
Poema para olvidarte Amar -nadie lo ignora- viene a ser como un juego: el juego de dos almas y el juego de dos vidas. Y hay quien gana y quien pierde. Tal vez lo sabrás luego, si yo logro olvidarte pero tú no me olvidas. Yo sé por qué lo digo. La vida tiene un modo sutil de detenerse mientras sigue adelante, y una mujer bonita puede olvidarlo todo menos su última cita con su primer amante. Por eso, allá... tan lejos.... en tus tardes de hastío, puede ser que comprendas que el hombre a quien quisiste llenó de mariposas tu corazón vacío y de fechas alegres tu calendario triste. Y como tu pasado no pasó todavía tendrás que recordarme viendo en tu tocador aquellos espejuelos oscuros con que un día disimulaste un poco tus tijeras de amor. Y yo sé que otro día, de rezos y conjuros, te dirán que me he muerto - yo sé que será así- y te pondrás los mismos espejuelos oscuros para que nadie sepa que lloraste por mí. José Angel Buesa Salu2
UN SOL Mi corazón es como un dios sin lengua, mudo se está a la espera del milagro, he amado mucho, todo amor fue magro, que todo amor lo conocí con mengua. He amado hasta llorar, hasta morirme, amé hasta odiar, amé hasta la locura, pero yo espero algún amor-natura capaz de renovarme y redimirme. Amor que fructifique mi desierto y me haga brotar ramas sensitivas, soy una selva de raíces vivas, sólo el follaje suele estarse muerto. ¿En dónde está quien mi deseo alienta? ¿Me empobreció a sus ojos el ramaje? Vulgar estorbo, pálido follaje distinto al tronco fiel que lo alimenta. ¿En dónde está el espíritu sombrío de cuya opacidad brote la llama? Ah, si mis mundos con su amor inflama yo seré incontenible como un río. ¿En dónde está el que con su amor me envuelva? Ha de traer su gran verdad sabida... Hielo y más hielo recogí en la vida: Yo necesito un sol que me disuelva.... Alfonsina Storni
ALÍ AL HADED Soneto para mi amada Con un beso tú me das otra vida y por un beso te cedo mi amor y en cada amanecer habrá un color tornándote mi bella flor querida. Tus labios rozarán mi lengua hervida y los suspiros del alma mi ardor; será una noche con ritmo y sabor y nuestra pasión como una estampida. ¿qué los angeles cerrarán los ojos? ¡ya, lo sé! y no me importa, ¡mujer mía! seremos tú y yo tal vez dos abrojos. ¿qué la luna sonreirá casi pía y la noche burlará los cerrojos? ¡ya no importa mi sol! ¡tú eres mi guía!
Te Amo Te amo por todas los hombres que no he conocido Te amo por todos los tiempos que no he vivido Por el olor del mar inmenso y el olor del pan caliente. Por la nieve que se funde por las primeras flores Por los animales puros que el hombre no persigue Te amo por amar Te amo por todas los hombres que no amo Quién me refleja sino tú mismo me veo tan poco Sin ti no veo más que una planicie desierta Entre antes y ahora Están todas estas muertes que he sorteado sobre paja No he podido atravesar el muro de mi espejo Tuve que aprender la vida como se olvida Palabra por palabra Te amo por tu sabiduría que no me pertenece Te amo contra todo lo que no es más que ilusión Por el corazón inmortal que no poseo Crees ser la duda y no eres sino razón Eres el sol que me sube a la cabeza Cuando estoy segura de mí...
NELSON BARRAGÁN Cómo dueles amor mío Noches de arrullos La envolvente brisa de tu amor A mí llega en orientales suspiros... y cómo dueles amor mío... Cómo duele tu lejanía Cómo duele tu vacía cercanía Cómo llora mi alma En suave y lenta agonía ¡¡y cómo dueles amor mío!! Eres tu amorosa luna Eres tú mi fortuna Eres también el desencanto Que ha traído mi locura ¡¡y cómo dueles amor mío!! En estos días estivales Mi sangre rebosa de tu ser Eres una en mí y soy uno en ti ¡¡Y cómo dueles amor mío... !! Palabras eternas en el viento Dulce miel del recuerdo Voces del pasado que me dicen De una sagrada promesa ¡¡Y cómo dueles amor mío...!!
El amor unitivo Tan unidas están nuestras cabezas y tan atados nuestros corazones, ya concertadas las inclinaciones y confundidas las naturalezas, que nuestros argumentos y razones, y nuestras alegrías y tristezas están jugando al ajedrez con piezas iguales en color y en proporciones. En el tablero de la vida vemos empañados a dos que conocemos a pesar de que no diferenciamos, en un juego amoroso que sabemos, sin ganador, porque los dos perdemos, sin perdedor, porque los dos ganamos.... Francisco Luis Bernárdez
JUAN FELIPE ACOSTA SÁNCHEZ El amor El amor es una fruta, espesa en su jugo, El amor es una sonrisa, una caricia, El amor es el silencio del crepúsculo, El amor es el rostro de un ángel, Mi huella en la tuya, Tu boca rota, maltratada por los vientos que te roban, El amor es una mirada ciega, Es un árbol seco y muerto, es la primavera, Eres tú y soy yo, el chocolate. El amor es un suspiro, casi una bocanada. El amor es tu beso en la nada, y una estructura de almíbar. Un castillo de cartas, la verdad y la mentira. El amor es una suerte de gracias, la cama húmeda, y el aire salitre. El amor es el cuerpo fresco cómo la hierba, tu novedad, mi morada. El amor es la lágrima qué en los ríos se agranda, Y tu risa, sonora, sonora cómo mi corazón que palpita.