Y QUE VENGA LA NOCHE Regálame la risa de tus ojos, la tenue luz de tu sonrisa, y el milagro de tu nombre en mi boca. Regálame la humedad de tus besos, el tibio manto de tu abrazo, y el mar embravecido de tu cuerpo junto al mío. Regálame el amanecer de tus pasiones, el espejo frágil de tus lluvias, y tu inocencia hecha mujer con mis caricias. Regálame tu amor amor y que venga la noche... CARLOS ENRIQUE UNGO (El Salvador)
ENAMORADO. Yo te amo corazón de agua Soy prisionero de tu cascada de sonrisas. Tu nombre llueve en mi piel Como una cadena de flores. Sólo tú suspendes mi voz en tus suspiros Y en tu suave tiempo imaginario Rumorea una bandera de rosas. La transparencia de tus sueños Galopa en mi camino de sombras Yo te amo corazón de agua. Alejandro Latorre , Poeta chileno.
MEMORIA DE LOS SUEÑOS “De toda la memoria, solo vale el don preclaro de evocar los sueños” Antonio Machado Un antiguo sonido, sin eco, rescatado. Una sombra entrevista, sin forma, adivinada. Un ensueño de niño, sin nombre, recobrado. Una vieja tristeza, sin causa, reencontrada. Un rostro apenas visto, de nuevo construido. Un perfume abolido, de pronto descubierto. Un amor ya apagado, surgiendo del olvido. Un delirio imposible, tenido como cierto. Un paisaje lejano, del ayer asomando. Una voz ya perdida, de vuelta del misterio. Una pena escondida, nuestro pecho agitando. Una muerta palabra, reviviendo su imperio. Esta dicha pasada, o aquel gozo marchito; tantos sueños frustrados!, cuántos vanos anhelos!, otra vez alentando su tropel infinito por la lírica vía de sonoros desvelos. Intuición misteriosa de insondables vivencias, memoria de los sueños sin cesar agitada, mientras el canto erige sus secretas secuencias y nos llena su luz en la noche callada. NESTOR MADRID MALO. (Colombia)
A Cupido Quien de tantos burdeles se ha escapado y tantas puterias ha corrido, que le traiga a las manos de Cupido, al cabo y a la postre, su pecado! Mas quisiera un incordio en cada lado y por atras tener un escupido que verme, viejo y loco, entretenido del viento, y en el aire enamorado. Comence este camino muy temprano sin estar libre una hora de contienda, y todo lo recojo agora en suma: rapaz tinoso, ten queda la mano, que te dare de azotes con la venda y pelarte he las alas pluma a pluma. Diego Hurtado de Mendoza
No he encontrado la poesía que a continuación relato, la verdad es que me extraña. ¿Qué Es Poesía? ¿Qué es poesía?, dices mientras clavas En mi pupila tu pupila azul. ¡Qué es poesía! ¿Y tú me lo preguntas? Poesía eres tú. *Gustavo Adolfo Bécquer
De: "Amsterdam" (Inédito) Hubo alguna vez un resplandor lunar en un hombro que ella desnudó por un momento. Todo fue, en ese instante, acequias, larvas, argamasas, un hilo fino y blanco que el silencio devanaba y cuchillos que rasgaban los siete espejos del viento. En el breve instante en que fuera revelada a mis ojos esa breve porción de su carne, y una firme, decidida voluntad pulsó la tierra y le dio fuente, edad, al agua, flujo y reflujo, puso en movimiento los motores, las olas.. Ella se desviste frente a un espejo. Desnuda, en otro instante de su existencia de baya que madura para la muerte y el deseo, parece resignarse al eterno juego que alterna los días y las noches, trae mayo después de abril, lleva y quita las aguas de las playas, da vida y mata a cada cual, no importa si sintió miedo con cada relámpago, anduvo por húmedos caminos o durmió bajo cielos siempre en fuga. Y sin embargo, afuera, en lo profundo de la tierra, en plena mañana, una oscura ciega criatura del crepúsculo cava con sus uñas hacia arriba, un súbito viento tira abajo la cortina que separa al público de la escena, un árbol incendiado atrae a las bandadas que al fuego una tras otra se precipitan y encuentran belleza en las llamas. CARLOS BARBARITO. (Argentina)
QUIÉREME ASI Quiéreme con excitación, Excítame con tu amor, mírame con el deseo, y deséame con la ternura, tócame con ganas y que las ganas te lleven a tocarme con ternura y deseo. Que me exciten el deseo y la ternura, tanto, que no sepa que me excita más. Que me enternezca el deseo y la ternura, tanto, que no sepa que me enternece más. Que sean como dos siamesas la excitación y la ternura, bello será que estén juntas, como buena y bienvenidas ambas. Que la una se sienta bien con la presencia de la otra, juntas en el alma y el cuerpo, juntas en el cuerpo y el espíritu. Que el deseo y la excitación sientan que crecen tanto como la ternura y el amor. Que el amor y la ternura sientan que crecen tanto como el deseo y la excitación. Que la una no se queje de la falta de la otra y que la otra no se queje de la falta de la una o al menos de la ausencia… Quiéreme así…!!! Con ternura y deseo Con amor y excitación Así quiero quererte Así quiero desearte Palabras para acariciarte Besar tu cuello Sentir tu olor Tener tus besos Perderme en tu boca Qué gusto!!! Sentirme al norte y al sur al este y al oeste decidido a entrar en mi y yo ansiosa de poseerte y verte luego gozoso indefenso y rendido al placer de mi cuerpo No hay más glorias!!!
SOY Soy un proyecto que sin fin perdura Un cúmulo de sueños proseguidos Un río deshaciéndose sin término Unos ojos muy verdes a mi lado Una voz construida en el silencio Unos libros escritos con mi sangre (Como Nietzsche ordenara a sus devotos) Una marcha iniciada en el desierto Un rostro que me busca a todas horas Una palabra oída a cierta sombra Un espíritu ardiendo en las tinieblas Una mente erigiéndose sin pausa Un andar con Machado junto a Soria (Con su espina dorada en mi costado) Un nombre que antes fue de un inocente Unas letras leídas no sé dónde Una navegación que siempre dura Una puesta de sol en el Janículo Una rosa de muerte portadora (La que Rilke tronchara una mañana) Una canción materna siempre oída Un recuerdo nocturno de mi padre Una visita a Etruria sepultada Un tren atravesando la llanura Un libro que no he escrito y que me espera Un disparo en el alba de mi sangre Una búsqueda insomne de secretos Una noche de luna en Portofino Unos nombres ya en sombras que rescato Un camino arduamente recorrido Una tarde de mármoles en Grecia Unas tumbas abiertas en el alma Una pena sufrida, aún doliendo Unos robles creciendo en la alta noche Un pueblo adormilado entre sus lomas Un balcón asomado en el recuerdo Una mañana en góndola, en Venecia Una ciudad que nombro desde el alma Una cierta agonía compartida Una antigua ternura por la frente Una noche sin término evocada Unos versos de pronto en dos partidos Una herida precoz entre las sienes Un amor a la ruina sentenciado Un mediodía hablando con Neruda Un frustrado asesino de tiranos Un diálogo en Castilla con Quevedo (Que un “Ah de la vida!” pronunciaba) Un barco que me trajo de la infancia Una nostalgia hiriéndome insistente Un patio donde almendros florecían Una cumbre entrevista en la mañana Un corazón creciendo hacia la muerte Un mar en el recuerdo contemplado Unas cartas de amor, de amor aun llenas Un adiós que incesante se repite Un asombro que es parte de mi sombra Un fin nunca logrado que se evade Y un poema, como este, interminable. Nestor Madrid Malo
EL AMOR Las voces del mundo han levantado sus soles En el interminable laberinto de la tierra Y nadie ha podido aún encontrar la esencialidad de su luz. Porque habita en el invisible corazón de la eternidad. Más allá de las palabras, de los sentidos y las ideas En el territorio oculto de tiempos escurridizos Su piel de mares infinitos acuna la fuerza de las esperanzas Agitando su melodía de fuegos en las manos del arco iris. Allí habitan las sombras corriendo libres por la luz En este terreno el amor sueña libre en su soledad Y las cruces desnudas diluyen su lenguaje de espumas Recibiendo la sencilla vibración de los corazones puros. El amor cae en cataratas silentes día a día Por las curvas sencillas del viento Desplazando su caudal de perfumes en el tiempo Sin más banderas que el acento claro de la paz. El amor es el secreto de los siglos en receso Que va dibujando su invisible rocío cósmico En los atardeceres temporales del espíritu Y abraza en silencio nuestros mundos profundos y luminosos.
EL UNICORNIO EXISTE AMOR El unicornio existe amor es la risa de los niños el milagro de un beso la caricia que quema las alas tibias de un sueño. El unicornio existe amor es la poesía de todos el canto de las aves el rumor de la tierra el perfume de las flores. El unicornio existe amor es el eco de tu nombre la agonía de tu ausencia el manto tibio de tus manos la rosa sagrada de tu sexo. El unicornio existe amor es la luz de tu mirada las estrellas de tu noche el suave mar de tus cabellos el territorio prohibido de tu cuerpo. El unicornio existe amor y resurge brioso salvaje victorioso cuando mi boca pronuncia tu nombre. CARLOS ENRIQUE UNGO (El Salvador)
Lourdes, supongo que te refieres a "QUIEREME ASI", es de una antología de poesia de amor, pero no te puedo decir cual es el autor ni cual es la antología. Lo he estado buscando, pero no he sido capaz de dar con el. Lo siento, de todas formas sigo en la brecha buscando. A proposito y aunque no sea este el foro "MUCHISIMAS FELICIDADES"
EL AMOR QUE CALLA Si yo te odiara, mi odio te daría En las palabras, rotundo y seguro; Pero te amo y mi amor no se confía A este hablar de los hombres, tan oscuro. Tú lo quisieras vuelto un alarido, Y viene de tan hondo que ha deshecho Su quemante raudal, desfallecido, Antes de la garganta, antes del pecho. Estoy lo mismo que estanque colmado Y te parezco un surtidor inerte. ¡Todo por mi callar atribulado que es más atroz que el entrar en la muerte.! Gabriela Mistral, poetisa chilena.
más allá más allá del propósito y la queja más allá de la lluvia desvestida más allá de los sueños terrenales más allá de los lunes soñolientos más allá de la luz de tu cintura más allá de tus manos y las mías más allá de la sombra y de la noche más allá de los años de la brisa más allá del camino y del mendigo más allá de las luchas y sus cantos más allá de los solos y cobardes más allá de las puertas de los ciegos más allá de tu lumbre y de la mía más allá del metal y del combate más allá de la cólera enemiga más allá de la arcilla y los jazmines más allá de la espina el viento el monte más allá de la tierra que me aguarda alada la neblina te recuerda Pablo Mora (Venezuela)