Bueno les dejo esta historia, un beso a los tres...Karo Del otro lado del mar había una isla. En la isla vivía una pescadora. Pescaba voces, las pescaba en el mar. Todos los días entraba a la orilla y tiraba las redes. Cuando pescaba las voces, las voces le hablaban y ella se las quedaba escuchando. Luego las devolvía al mar y se iba a dormir contenta. Un día pescó una voz muy grande. Tan grande era que parecía todas las voces juntas. La voz, apenas pescada, no dejaba de hablar: "Soy la voz de un marinero que me abandonó en medio del mar. No sé por qué me entregó al viento, creo que por algún secreto. Un secreto del viento. El marinero me entregó pero el viento ni siquiera se agachó a recogerme. Dejó que me hundiera en el agua, que me perdiera de mi marinero. Y a pesar de que mi marinero me abandonó, quiero volver a él, no puedo seguir así. Me abandonaron el viento y el marinero, no sé por qué". Toda la tarde la voz pescada estuvo lamentándose y contando. Entonces la pescadora decidió no devolverla al mar y guardársela. Y al día siguiente, invitó a la voz a subir con ella a una barca. La voz aceptó y se fueron a buscar al marinero. Varios días estuvieron dando vueltas con la barca mar adentro. La voz le describía el lugar a dónde la habían entregado, de golpe gritaba: "¡Creo que es allí!". Entonces la pescadora remaba y remaba hasta donde había señalado la voz, pero siempre se encontraban con el agua y el cielo. Siguió pasando el tiempo. La pescadora con la voz en la barca. Hasta que por fin distinguieron la vela de un barco. La pescadora empezó a remar con todas sus fuerzas, y la voz se puso a gritar como nunca había gritado antes. Fueron avanzando, avanzando, cuando la voz se dio cuenta de que era Tornado. Tornado estaba quieto, a duras penas hamacado por la brisa. Apoyada en la baranda de la cubierta, se veía la cabeza del marinero. Si la voz hubiera tenido garganta, se la hubiera desgañitado. La pescadora le pidió al viento que acelerara su barca. En eso, el marinero levantó la cabeza, había escuchado a su propia voz que lo llamaba. Se dio vuelta en dirección a donde venía la voz. Y allí la vio. Se la quedó mirando, y la reconoció. La voz se calló. Había mucho silencio. La barca se encontraba a pocos pasos, la pescadora remaba con los ojos clavados en el marinero. Ella también lo había reconocido. El marinero estiró los brazos, las manos, las puntas de los dedos. Ya casi llegaba la barca. No podía dejar de mirarla. Empujada por la brisa, venía hacia él. El secreto del viento. Ángeles Durini
Hola, Muy bonito el cuento de la estrella de venus, es un final feliz que igual conmociona, este de Ángeles Durini, tambien me gusto. El poema que me dejaste, es excelente , como casi todo lo de Neruda. El poema de Supermario que dejo vega, representa lo que yo siemto casi todos los dias cuando estoy en el trabajo. Para mi que vega tiene una camara oculta y vigila mi vida, porque siempre deja cosas que me dan que pensar... Y Gera cuando va a dejar algo? Salu2
Es que no tengo tiempo de buscarles nada...... pero les dejo a los 3 mi corazón....... Que tengan un excelente año los 3 y que todas vuestras expectativas se vean colmadas........
Esta todo bien Geraldine, si yo me conformo con tus caritas Karo has cambiado tu avatar, Porqué? Para las tres especialmente mis más sinceros deseos de felicidad para el 2005. No rechaces los sueños por ser sueños. Todos los sueños pueden ser realidad, si el sueño no se acaba. La realidad es un sueño. Si soñamos que la piedra es la piedra, eso es la piedra. Lo que corre en los ríos no es un agua, es un soñar, el agua, cristalino. La realidad disfraza su propio sueño, y dice: «Yo soy el sol, los cielos, el amor». Pero nunca se va, nunca se pasa, si fingimos creer que es más que un sueño. Y vivimos soñándola. Soñar es el modo que el alma tiene para que nunca se le escape lo que se escaparía si dejamos de soñar que es verdad lo que no existe. Sólo muere un amor que ha dejado de soñarse [...] Pedro Salinas Feliz 2005 para tod@s Salu2
Lo cambie por el momento, en señal de duelo. Y por que ya no creo tener ganas de saltar. Dolor Quisiera esta tarde divina de octubre pasear por la orilla lejana del mar; que la arena de oro, y las aguas verdes, y los cielos puros me vieran pasar. Ser alta, soberbia, perfecta, quisiera, como una romana, para concordar con las grandes olas, y las rocas muertas y las anchas playas que ciñen el mar. Con el paso lento, y los ojos fríos y la boca muda, dejarme llevar; ver cómo se rompen las olas azules contra los granitos y no parpadear; ver cómo las aves rapaces se comen los peces pequeños y no despertar; pensar que pudieran las frágiles barcas hundirse en las aguas y no suspirar; ver que se adelanta, la garganta al aire, el hombre más bello, no desear amar... Perder la mirada, distraídamente, perderla y que nunca la vuelva a encontrar: y, figura erguida, entre cielo y playa, sentirme el olvido perenne del mar Alfonsina Storny
karo, principito, gera... yo tampoco tengo muchas ganas de saltar, y tampoco de reir. besotes, veg@ Confianza Mientras haya alguna ventana abierta, ojos que vuelven del sueño, otra mañana que empieza. Mar con olas trajineras -mientras haya- trajinantes de alegrías, llevándolas y trayéndolas. Lino para la hilandera, árboles que se aventuren, -mientras haya- y viento para la vela. Jazmín, clavel, azucena, donde están, y donde no en los nombres que los mientan. Mientras haya sombras que la sombra niegan, pruebas de luz, de que es luz todo el mundo, menos ellas. Agua como se la quiera -mientras haya- voluble por el arroyo, fidelísima en la alberca. Tanta fronda en la sauceda, tanto pájaro en las ramas -mientras haya- tanto canto en la oropéndola. Un mediodía que acepta serenamente su sino que la tarde le revela. Mientras haya quien entienda la hoja seca, falsa elegía, preludio distante a la primavera. Colores que a sus ausencias -mientras haya- siguiendo a la luz se marchan y siguiéndola regresan. Diosas que pasan ligeras pero se dejan un alma -mientras haya- señalada con sus huellas. Memoria que le convenza a esta tarde que se muere de que nunca estará muerta. Mientras haya trasluces en la tiniebla, claridades en secreto, noches que lo son apenas. Susurros de estrella a estrella -mientras haya- Casiopea que pregunta y Cisne que la contesta. Tantas palabras que esperan, invenciones, clareando -mientras haya- amanecer de poema. Mientras haya lo que hubo ayer, lo que hay hoy, lo que venga. (Salinas también)
Gracias Amigos por todo su apoyo. Gracias Veg@, por la hermosa poesia. Gracias Mi Dulce Principito... Hoy recibi una linda noticia, mi amigo y forero Tedditzin de Villa Celina (el lugar de donde salio mucha de la gente que fue a ver a Callejeros en el boliche Republica de Comagnon) está bien y la mayoria de sus amigos tambien. Eso me devuelve un poco la esperanza...asi que hoy no les dejo un poema sino una canción muy bonita de Lerner. Volver a empezar Pasa la vida y el tiempo No se queda quieto Llego el silencio al fin Con la soledad Y en que lugar anida de mis sueños nuevos Y que me dará una mano Cuando quiera despertar Volver a empezar Que aun no termina juego Volver a empezar Que no se apague el fuego Queda mucho por andar Y que mañana será un día nuevo bajo el sol Volver a empezar.. Se fueron los aplausos y algunos recuerdos Y el eco de la gloria duerme en un placar Yo seguiré adelante atravesando miedos Sabe Dios que nunca es tarde Para volver a empezar Volver a empezar Que aun no termina juego Volver a empezar Que no se apague el fuego Queda mucho por andar Y que mañana será un día nuevo bajo el sol Volver a empezar… Volver a intentar… Volver a empezar … Volver a empezar Que aun no termina juego Volver a empezar Que no se apague el fuego Queda mucho por andar Y que mañana será un día nuevo bajo el sol Volver a empezar… Volver a intentar… Volver a empezar … [bis] Alejandro Lerner
karito, me uno al duelo de nuestros vecinos y hermanos argentinos...... Estuve en Punta del Este el 31 y sentíamos la tristeza de los argentinos que cada año colman nuestras costas........si bien hubieron muchos fuegos artificiales, no era lo mismo........ Cuánto dolor.....cuánta impotencia......
Gera no te queria responder para no ponerme mal nuevamente, pero creo que eso es inevitable. Hoy el numero de fallecidos ascendio a 183, al morir una nena de tan solo 11 años. Cuya mamá y uno de sus hermanos ya habian fallecido en la tragedia, el papá está en terapia intensiva en estado grave. Y de las manifestaciones ni hablar, todos estan cegados por el dolor y no fue un acto coherente o a la altura de la situación. SUEÑOS III Ojo derecho de halcón solsticio de verano vacío extendido color de mar abierto sin bordes para el vuelo serenidad sin huella atracción de infinito. Por qué no transgredir/ quebrantar la ley de gravedad y dejar la tierra/ olvidarse los pies y buscar / buscar el alba o el inicio donde están nuestros nombres y cambiarlos por plumas / por palabras sin intención de rastros. No quiero esa señal ese destello / si todo lo que el tiempo desenrolló del paño / huele a sangre/ a carne mutilada/ para qué contenerme en esta tierra en esta especie dotada de razón de horror obsecuente. Si la imagen es la misma hay que romper el espejo/ demorarse en los siglos limpiar las fuentes de contagio comenzar otra vez / en el sueño sin nada ser sólo una letra en medio del abismo. OLGA EDITH ROMERO Argentina
Aunque voy por ahi...tratando de no ser presa del dolor. La realidad implacable me alcanza y me deja un número que sigue subiendo a pesar del esfuerzo de las victimas por sobrevivir. Este asciendo hoy a 185, al morir una nena de 10 años y una joven de 25. Rezo por las otras personas en estado grave, para que la muerte no los alcance. Para ellos una canción de Callejeros Una Nueva Noche Fria Voces, sólo voces, como ecos; como atroces chistes sin gracia. Hace mucho tiempo escucho voces y ni una palabra. Y mis ojos maltratados se refugian en la nada y se cansan de ver un montón de caras y ni una mirada. Una nueva noche fría en el barrio, los tranzas se llenan los bolsillos. Las calles son nuestras, aunque el tiempo diga lo contrario. Y los sueños no soñados, ya se amargan la garganta y se callan. Y eso, casi siempre (o siempre), les encanta. Van quedando pocas sonrisas, prisioneros de esta cárcel de tiza. Se apagó el sentido, se encendió un silencio de misa. Menos horas en la vida, más respuestas a una causa perdida: de porqué los sentimientos, vuelven con el día. Solo, como un pájaro que vuela en la noche (libre de vos...pero no de mí) Vacío, como el sueño de una gorra. Lleno de nada, sin saber donde ir. Duro como un muerto en su tumba que murió de miedo, por el valor de vivir. Las nubes no son de algodones y las depresiones son maldiciones. Te va distrayendo, te enrosca, te lleva y te come. Te lastima y no perdona y en algún lugar te roba la cara, la sonrisa, la esperanza, la fé en las personas. Solo como un pajaro que vuela en la noche libre de vos pero no de mí vacio como el sueño de una gorra lleno de nada, sin saber donde ir. Duro como muerto en su tumba que murio de miedo por el valor de vivir. El grupo ya no sabe si va a seguir tocando, los integrantes....estan abocados a las personas a los que luchan por su vida. Brindando y buscando a poyo y contención a los familiares e internados.
Hola, karo la letra de la canción de Callejeros que dejaste es muy buena, es la canción mas conocida popularmente que tiene esa banda, la pasaban frecuentemente en la radio. Sobre las tragedias no puedo escribir nada porque las cosas así me afectan muy de cerca, me convierto en un desastre, que no hace más que reflejar mi incapacidad para decir algo coherente o significativo ante tanta angustia y dolor. Me siento hipócrita, egoísta, culpable, etc. Yo que sé, soy simplemente un boludo. El Salinas de veg@, es muy bonito, a mi con ese autor me pasa algo extraño es como que me gustan sus poemas, aunque siempre aparece una frase con la que estoy completamente en desacuerdo; que loco, no? Salu2
Bienvenido al club, los sentimientos que describis pasan por mi, constantemente... hasta el punto de sentirme culpable por querer estar bien. Pero creo que sintiendonos asi, no solucionariamos nada. Uno no modifica su forma de pensar o de sentir, solo por seguir adelante. En el fondo hay que acostumbrarse a convivir con el dolor, no por resignación.....sino para poder ser más fuertes, y no dejarnos abatir. Lo demás... será según la circunstancia. Lo de la radio no se ni idea, no escuho nada de radio....no me gusta que me digan que tengo que oir. Lo de la canción...si muy buena, como muchas otras... que no son tan conocidas... Morir En hojas muy viejas me leo el futuro, al medio el cerebro se parte por el sol. El negro es muy blanco en mi ciego destino, vomito mil frases y ni una canción. Me aferraré a la muerte sólo si es el mejor pasaje. Es la cita a ciegas que no hay que esperar. Quiero morir de cara al sol. Quiero salir... Las ratas que estafan y zafan son muchas. Y son las que bendicen sus miserias al final. Soguean paraísos en los últimos metros y piensan que rogando las condecorarán. El tipo que ignora muere y vive contento, no sabe que hay cosas que se pueden cambiar. Será buen ciudadano para el dictador (el que asesina y lo niega) y después pedirá que vuelvan a ''dictar'', sólo por seguridad. Un Dulce Principito.
la vigilo, sin duda..... Yo vigilo a tod@s l@s cronopi@s american@s... así que ya podéis ser buenos los tres. ¿por qué me copias las ideas, principito?...y no sólo hay alguna frase con la que estoy en desacuerdo, a veces es que creo que se le van las ideas a otro sitio, o no le entiendo, no sé.... bueno, mi historia de hoy, un relatillo, que no sé por qué me gusta tanto, pero me gusta. TATUAJE Esa pequeña aguja dolía al penetrar mi piel. Me quedé mirando cómo la sangre se coagulaba en minúsculas gotas y el dibujo iba apareciendo. El color de las marcas era azul cobalto. Azul, el color de la curación. El hombre que dibujaba tenía el entrecejo fruncido, estaba profundamente concentrado. Llevaba sangre indígena, de la nación de los Pies Negros. El hombre habló: <¿Tienes hijos?> Su voz retumbaba como un eco en mis oídos y recordé una reunión que tuve unos meses atrás. Entonces, una mujer me había formulado la misma pregunta. No esperó mi respuesta, sino que empezó a hablarme de sus propios hijos. Yo no dije nada. La mujer me volvió a hacer la misma pregunta, mirando mis ropas viejas. Hice un movimiento negativo con la cabeza: -No, en realidad, no. -Ah, entonces no puedes entender lo que significa el dolor de la separación. Mi mente retrocedió aún más, hacia un pasado en que La Gris estaba en el norte. ¿Tengo hijos? Recuerdo al abuelo, que, en mi imagen mental, sonríe. Contesta: Sí, tienes una hija. ¿Es que debo mostrar mi hija a esa mujer? Estudio su rostro. -Tengo una hija. - Contesto lacónicamente. El rostro de la mujer demuestra interés. -¿Ah, sí, cómo se llama? -Tiene tres nombres, McKenzie, su nombre de pila, la Gris, como yo la llamo en mi libro de poesía, y Baby, su sobrenombre. -¡Qué dulce! ¿Qué edad tiene? -Cinco años. -Es una edad maravillosa, cinco años. La mujer se mostraba satisfecha con mi conversación y se alejó, contenta. Más tarde, supe que le preguntó a una íntima amiga mía sobre mi hija, McKenzie. Mi amiga le dijo a la mujer que mi hija no era una niña de 5 años, sino un lobo gris Aquel hombre me hace daño con la aguja y me devuelve al presente. Dibuja cuatro huellas de color cobalto alrededor de mi muñeca izquierda, y mi sangre se mezcla con el dibujo azul. Es el viejo símbolo que representa los pies vagabundos de un lobo. Mi hija me llama con su corazón, en las altas montañas del norte. Recuerdo cuando salía a cazar con ella, lo difícil que le resultó aprender a matar. La búsqueda de la pequeña manada a la que tendría que unirse. El dolor de la separación, habvía dicho la mujer. Los senderos de la vida, agrego yo. El hombre concluye el sendero del lobo azul alrededor de mi muñeca. Limpia mi sangre y sonríe amablemente, Cojo el algodón y, más tarde, lo quemo entre las llamas del fuego de troncos de cedro, delante de mi casa. Cuando el humo se eleva, pienso lo que me ha dicho. <Tienes una hija> Teresa <Tsimmu> Martino besos, vega